El catedrático de Fisiología de la Universidad de León y director del Instituto de Biomedicina (IBIOMED) Javier González Gallego, impartió una conferencia en la Universidad Europea del Atlántico sobre la manipulación genética en el ámbito deportivo. González Gallego se refirió al también llamado dopaje genético, y ofreció varias claves para entender el estudio y seguimiento de los agentes usados actualmente en el deporte de alta competición.
“El mayor peligro de una manipulación genética con fines deportivos es que no se sepa lo suficiente acerca de los efectos que pueda producir” señaló el ponente. El dopaje “tradicional” de estimulantes y anabolizantes consistía en introducir una sustancia en el cuerpo, mientras que, en el dopaje genético, se manipula el gen que produce la sustancia dentro del propio organismo.
Según el catedrático, uno de los mayores problemas que presenta la manipulación del gen es que tiene que ser equilibrada. La miostatina, un factor de crecimiento explicado por el director del Instituto de Biomedicina durante la conferencia, tiene la función en el organismo de limitar el crecimiento del tejido muscular. “Si se introduce un agente que bloquee la acción de este factor, el crecimiento del tejido muscular se potencia y por tanto se puede conseguir más rendimiento deportivo, pero si no potencias también los genes de las articulaciones y los ligamentos, surgen muchos riesgos para la salud por la descompensación”.
González Gallego hizo también hincapié en que “no se sabe hasta qué punto se utiliza el dopaje genético en la alta competición”. Pero también añadió que “hay determinados deportes en los que se recurre muchísimo al dopaje tradicional porque el nivel de exigencia es excesivo; por tanto, cuando se vea que determinados agentes genéticos funcionan bien y los riesgos son relativamente reducidos, se empezará a utilizar frecuentemente”.
Desde el Instituto de Biomedicina, el grupo colaborador del catedrático en Fisiología estudia los genes en el ámbito deportivo, en cómo el ejercicio, el entrenamiento y la nutrición afecta a la expresión de dichos genes.