Las obras de la nueva residencia de estudiantes de la Universidad Europea del Atlántico, situada en el Parque Científico y Tecnológico de Cantabria, avanzan a buen ritmo y según los plazos previstos, y estarán listas para el comienzo del próximo curso 2017-2018.
Para conocer algunos datos sobre el nuevo edificio, hemos hablado con el responsable del proyecto, el arquitecto Carlos Galiano, quien nos ha explicado la capacidad, la tipología de los alojamientos y los servicios que estarán disponibles en la residencia.
La residencia dispondrá de 36 apartamentos compartidos de 115 m2 de cuatro habitaciones individuales con baño cada uno. Estos alojamientos tendrán cocina común equipada con frigorífico, vitrocerámica y microondas. Los dormitorios contarán con cama individual, armario, escritorio, estanterías, flexo y silla de estudio. El salón-comedor común tendrá sofá, mesas y sillas y televisión. Igualmente existirá la posibilidad de que un familiar utilice una cama supletoria hasta quince días, mediante pago adicional.
La residencia ofrecerá también 57 habitaciones compartidas de entre 28 y 45 m2. Todas ellas dispondrán de dos camas, dos escritorios, cocina y office, además de televisión. También estarán a disposición un total de 6 apartamentos adaptados para personas discapacitadas. Su tamaño variará según las necesidades y las habrá de una o de dos camas.
Todas las habitaciones de la residencia contarán con suministro de agua, luz, gas y calefacción incluidos en la mensualidad, wifi en todas las instalaciones de la residencia, sábanas y toalla para cada alumno y limpieza de habitación así como cambio de sábanas y toallas un día por semana. Los huéspedes de la residencia también podrán utilizar un autoservicio de lavandería en las propias instalaciones.
Una completa gama de servicios facilitará la vida universitaria de quienes se alojen en la residencia de la Universidad Europea del Atlántico. Los residentes contarán con una amplia biblioteca, restaurante, comedor y una sala común de 130 m2 dotada de televisor.
Las salas de estudio e informática permitirán a los estudiantes concentrarse en su trabajo, pero también contarán con un gimnasio de 335 m2 y una plaza común exterior de 400 m2. Un aparcamiento y una zona verde común completan unas instalaciones de vanguardia, cómodas, funcionales y diseñadas con criterios de eficiencia energética para cubrir las necesidades de alojamiento de profesores, investigadores y estudiantes.
“Sobre todo, hemos procurado construir estancias con la mayor cantidad posible de luz natural -indica Galiano-, para que quienes se alojen aquí dispongan de espacios agradables y amables”.