La doctora en Psicología Alba Hernández fue la ponente de la segunda jornada correspondiente al ciclo de conferencias titulado “Herramientas de intervención en el aprendizaje en la realidad escolar-académica actual”, que organiza la Universidad Europea del Atlántico. Esta serie de ponencias forma parte de la iniciativa “Toma un café con UNEATLANTICO”, está dirigida especialmente a psicólogos, profesores y a consejeros vocacionales de los colegios e institutos y tiene el objetivo de colaborar con los orientadores, para ayudar a los estudiantes a reunir toda la información posible antes de elegir una carrera universitaria y, en definitiva, un futuro profesional.
La doctora Hernández abordó el tema titulado “El conflicto como oportunidad para la práctica docente”, que tuvo un amplio seguimiento, no solo desde diferentes puntos de España, sino también desde el otro lado del Atlántico, con espectadores de Ecuador Panamá, El Salvador, Bolivia, México, Colombia, Honduras, Nicaragua, Haití, Costa Rica, Uruguay, Brasil, Venezuela, Guatemala y República Dominicana.
La ponente inició su intervención reconociendo que “históricamente tenemos una visión negativa del conflicto, ya que asociamos la armonía como única posibilidad de bienestar. Pero a lo largo del tiempo se ha ido avanzando en esa perspectiva. Hoy en día sabemos que el conflicto no solo es real y, por tanto, inevitable, pero además también es necesario y útil”.
Por supuesto, esta información tiene sus matices, porque no pretendemos una vida conflictiva, ni dentro de las aulas, ni en nuestra vida social, “pero lo cierto es que el conflicto es la raíz del cambio, así que muchas veces los avances necesitan contradicciones que pueden conducir a enfrentamientos”. La doctora Hernández opina que el conflicto “nos permite crecer y desarrollar nuevas habilidades, que nos ayudarán a enfrentar mejor futuros conflictos”. Es por esto que la conferenciante sostiene que “el propio proceso de vivir y superar una situación de conflicto tiene un valor educativo en todas las edades”.
Apoyándose en la definición que Rubin, Pruitt y Kim elaboraron sobre el conflicto, Hernández recordó que “se trata de una divergencia percibida de intereses o una creencia de que las aspiraciones actuales de las partes no pueden ser alcanzadas simultáneamente”, por lo que diferenció la manera de enfrentar la crisis “priorizando mis intereses o priorizando las necesidades de los demás”, concluyendo que “el estilo colaborativo sería el ideal”.
La tercera y última conferencia de este ciclo será impartida en la tarde de hoy jueves a las 16:00 (hora española) por el doctor en Psicología, Juan Luis Martín, y lleva por título “la influencia del contexto familiar en el desarrollo socio-emocional”.