El pasado día 21 de noviembre, el director de Relaciones Institucionales de la Fundación Universitaria Iberoamericana, de la Cátedra FUNIBER de Estudios Iberoamericanos y de la Iberofonía y profesor de la Universidad Europea del Atlántico (UNEATLANTICO), Dr. Frigdiano Álvaro Durántez Prados, se incorporó a la Academia de la Diplomacia, las Relaciones Internacionales y el Protocolo como académico de número de esta prestigiosa institución española.
El Dr. Durántez ya pertenecía a la Academia de la Diplomacia desde el año 2015, pero en calidad de académico de honor. La circunstancia de que ingresase entonces en condición honorífica, según desveló en el solemne acto el presidente ejecutivo de esta institución, Santiago Velo de Antelo, se debió a las responsabilidades institucionales que desempeñaba Durántez como vocal asesor de Estudios e Informes de la Casa de S.M. el Rey de España, las cuales aconsejaban ese perfil específico. Durántez fue reconocido en aquella oportunidad por sus trabajos en el área de la geopolítica hispánica y como pionero e impulsor del paniberismo, la corriente que propugna la articulación de un espacio multinacional de países de lenguas española y portuguesa —los países iberófonos— de todos los continentes, sin excepciones geográficas.
Precisamente, la Academia de la Diplomacia y FUNIBER firmaron un convenio de colaboración en octubre de 2022 para impulsar la cooperación institucional en el ámbito iberófono.
En esta oportunidad, el nuevo académico de número se refirió someramente a la cuestión del paniberismo y la Iberofonía, pero centró su conferencia magistral en la temática “Gobernanza y Civilización Universales”, materia sobre la que ya disertó en años previos en instituciones como la Universidad Autónoma de Lisboa (Revista Diplomacia Siglo XXI, n. 100, diciembre de 2017, pp. 28-34.), con la que la Universidad Europea del Atlántico tiene convenio de colaboración. En opinión del Dr. Durántez, el mundo de la Iberofonía, en el que se centra la acción educativa, científica y cultural de FUNIBER, puede realizar una aportación fundamental a la articulación de una Comunidad universal y a su misma gobernanza.
Cada académico de número ocupa una Silla con el nombre de un diplomático o de una figura significativa de la historia universal de España. El Dr. Durántez eligió el nombre de Gabriel de Castilla, el almirante español que en 1603, partiendo del Virreinato del Perú y de la Capitanía General de Chile, se adentró en las latitudes australes hasta alcanzar los 64 grados sur, siendo reconocido por ello como el protodescubridor de la Antártida. F. Álvaro Durántez hizo al respecto una analogía con la condición del continente antártico como bien común global cuya gestión y equilibrio serán esenciales en una Comunidad universal estructurada.
En el acto, que tuvo lugar en la histórica Torre de Los Lujanes, de Madrid, sede de la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País, se nombraron académicos correspondientes y honorarios entre miembros del cuerpo diplomático acreditado en España y otras personalidades. En nombre de todos los nuevos académicos pronunció unas palabras el decano del cuerpo diplomático, monseñor Bernardito Auza, arzobispo de nacionalidad filipina Nuncio Apostólico de Su Santidad.