El doctor Iñaki Elío, director académico del grado en Nutrición Humana y Dietética en UNEATLANTICO, ha analizado para El Diario Montañés los resultados de la encuesta social sobre los hábitos alimenticios realizada por el Instituto Cántabro de Estadística, concluyendo que, en general, “se aprecia un déficit en el consumo de fruta, verdura y pescado”.
El decano de la prensa de Cantabria recogió los resultados de esta encuesta en un amplio reportaje de dos páginas en las que el doctor Elío desgrana los datos arrojados por la encuesta. “Los resultados son bastante deficientes en frutas y verduras. Debemos consumir ambos tipos de alimentos cinco veces al día -señaló Elío– y la media que refleja el estudio es de ocho veces a la semana. Muy poco”.
El dietista y nutricionista ponía de manifiesto un dato demoledor sobre la incidencia del consumo de estos alimentos y el riesgo de muerte prematura. “Hay numerosos estudios que nos demuestran que se puede reducir la muerte prematura en personas adultas hasta un 31% si aumenta el consumo de frutas y verduras”.
Respecto al consumo de pescado, Iñakí Elío recomendó no sobrepasar las tres dosis semanales de carne. “Hay que alcanzar cuatro dosis de pescado semanales, y al menos dos de ellas azul. Es muy conveniente equilibrar la carne y el pescado, reduciendo el consumo de la primera y aumentando el del segundo. La Organización Mundial de la Salud asocia el riesgo de padecer cáncer colorrectal con el consumo excesivo de carne, en especial de productos cárnicos procesados”.
Los hábitos de alimentación tienen un importante reflejo en la esperanza de vida, que en Cantabria llega a los 86,1 años en el caso de las mujeres y a los 80,3 años en el caso de los hombres. Aún se come mal, pero no tanto como en años precedentes. “Están cambiando los patrones sociales -indica Elío– y el foco se está poniendo en los hombres. Antes, mostrar una barriga prominente era un signo de salud, pero ahora se cuida más el peso, la forma física, la alimentación,…”
Un último dato muy llamativo recogido en el estudio nos alerta de que los jóvenes de 16 a 24 años nunca consumen verdura, el 14% jamás toma fruta y el 10,5% rechaza el pescado. “La gente joven come de forma desequilibrada -señala el especialista de UNEATLANTICO– y se deberían llevar a cabo más campañas de concienciación”.