Estudiantes de cuarto curso del grado en Educación Primaria que imparte la Universidad Europea del Atlántico (UNEATLANTICO) han visitado el CEIP Cisneros en el marco de la asignatura «Didáctica de las Ciencias Sociales», llevando a cabo en esta actividad guiados por los docentes de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades Samuel Allende y Beatriz García.
El objetivo principal de esta salida ha sido brindar a los alumnos la oportunidad de ampliar su visión sobre metodologías activas e innovadoras, centrándose en la enseñanza de las Ciencias Sociales, pero aplicable a contextos multidisciplinares y en línea con la legislación educativa actual, conocida como Lomloe.
Para llevar a cabo esta experiencia, se han desplazado al entorno del CEIP Cisneros, ubicado en el centro de Santander. Además, han contado con la valiosa colaboración de José Antonio Sánchez Raba, un profesional de la educación con más de 40 años de experiencia y exdirector de dicho centro.
La razón por la que decidieron visitar el CEIP Cisneros se debe a su proyecto educativo coherente con los derechos humanos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Temas que además son fundamentales dentro de la asignatura que imparte la docente García, quien ha señalado que «en los próximos años toda la ciudadanía deberíamos esforzarnos por poner nuestro granito de arena en el cumplimiento de los ODS: piensa global, actúa local». De ahí que se deba educar en coherencia con ello.
Asimismo, la profesora ha destacado que el colegio de Santander no se queda en la «sensibilización», sino que también pasa a la «acción». Esto a través de actividades como el «Itinerario didáctico», en el que «una de las actuaciones es descubrir lo que los alumnos encuentren a su alrededor, qué pueden mejorar o aprovechar para ayudar a cumplir o al menos avanzar hacia la consecución de los ODS».
¿Qué debe tener en cuenta el futuro docente?
«El estudiante de cuarto del grado de Educación Primaria es el docente del mañana», ha afirmado la profesora García. Es por ello que ha hecho referencia a que la autonomía de los que serán sus alumnos debe ser promovida pasando del aprendizaje pasivo al activo donde cada uno participa activamente y experimenta con la información y el entorno. Además, donde la relación entre el profesor y el alumno es bidireccional. De acuerdo con ella, es imprescindible apoyar y fortalecer las alianzas entre la escuela y la comunidad. Esto para promover currículos más localizados y basados en el entorno, vinculando el aprendizaje con los problemas del mundo real.