Un estudiante de Industrias Agrarias y Alimentarias obtiene el título europeo juvenil y el subcampeonato senior de fisioculturismo

26 Sep 2022
Un estudiante de Industrias Agrarias y Alimentarias obtiene el título europeo juvenil y el subcampeonato senior de fisioculturismo
Francisco A. Dueñas obtuvo la medalla de oro en categoría juvenil y la de plata en senior

Tras muchos meses de trabajo y sacrificio, el estudiante salvadoreño Francisco A. Dueñas, de 4º curso de Industrias Agrarias y Alimentarias, ha obtenido dos medallas, una de oro en categoría juvenil y una de plata -en senior- en el Arnold Sports Festival Europeo, celebrado en Sevilla. Con este último trofeo, acumula ya dos títulos de campeón nacional en sus respectivas categorías en su país natal (2017 y 2018), dos veces Top 3 Centroamérica, 4º y 5º puesto en Centroamérica y en el Caribe y 6º en el mundial del año pasado.

En esta ocasión, el tiempo jugaba a su favor puesto que había planeado competir en junio aunque finalmente no lo hizo, por lo que para el campeonato europeo de septiembre aprovechó la condición física que ya tenía y le dio continuidad a esa misma preparación.

La clave para él es tener una motivación a la que aferrarse en los momentos en los que la mente flaquea, en especial tras la transformación física que se sufre durante el proceso de preparación. Cuenta que esta vez ha pasado de 84 kg a 65 kg, una pérdida de casi 20 kg entre grasa y líquido. Asimismo, explica que “no importa las veces que lo hayas hecho antes”, siempre se sienten inseguros y les abordan pensamientos negativos sobre su cuerpo. Para él, su gusto y su deseo de competir es suficiente para seguir adelante, porque su mayor motivación es él mismo. Piensa en otras competiciones pasadas y quiere autosuperarse, mejorar y siempre dar más de sí. Se considera privilegiado por poseer “una competitividad y una ambición sana, no obsesiva”, y por disfrutar de ello.

Por otro lado, habla del ambiente con sus compañeros, que varía dependiendo de la competición. “Cuando son competencias nacionales en las que generalmente hay gente que ya conoces, sí suelen ser más amigables”. Sin embargo, cuando son internacionales, como todos proceden de diversos países, hablan diferentes idiomas, “te ven distinto a ellos y hay más competitividad, más tensión. Pero siempre haces amigos”. En esta ocasión, una compañera de otra disciplina le ayudó a pintarse el bronceado con el aerógrafo, al igual que en muchas otras ocasiones se ayudan unos a otros con las zonas más complejas de alcanzar como la espalda.

 

Compatible con los estudios

En cuanto a compaginar la exigencia del fisicoculturismo con sus estudios en UNEATLANTICO, Francisco A. Dueñas considera ventajoso que no es una situación nueva para él. De pequeño “siempre he hecho de todo”, desde locución a pintura y siempre ha tratado de compaginarlo con algún deporte. Ya desde los 15 años comenzó a entrenar y a competir en el culturismo y todo lo que ha hecho después ha tratado de llevarlo de la mano. Y aunque según dice, no tiene mucho que ver con su carrera, de hecho, el área que más le interesa es el de la construcción, pero aún así lo ha llevado bien y únicamente le queda por presentar el Trabajo de Fin de Grado. Lo define como “dos facetas de muy diferentes entre sí que me gustan por igual”.

 

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Francisco A. Dueñas (izquierda de la imagen)

 

Afirma que le alegra haber ganado este mundial, no solo por lo que representa en sí mismo, sino porque al menos para El Salvador ha sido un gran logro. Se ha convertido en el primer salvadoreño que consigue ganar el oro en este evento en la historia de su país. Por ello, muchas personas de allí le han felicitado y su victoria se ha reconocido en periódicos salvadoreños como un “orgullo nacional”. Motivado por ello, asegura que se siente aún más comprometido a seguir esforzándose. Tiene en mente ir al mundial en noviembre y a otro evento en diciembre. Además, destaca que por encima de todo se siente orgulloso de la condición física con la que llegó a la competición, porque aunque pueda quedar en un quinto puesto o último, siempre se fija más en el trabajo que ha hecho él mismo, no en el puesto que le dan.